Capítulo 16
Watersday, 18 de Messis
Volviendo
de Desembarco del Ferry, Kowalski estacionó su coche en el estacionamiento para
clientes del Courtyard y miró a Monty.
—
¿Acabamos de flexionar algunas reglas o comprar en el mercado negro?
—Ni
uno ni lo otro, —replicó Monty—. Desembarco del Ferry no está bajo control
humano. Los carniceros y los tenderos pueden poner limitaciones cuando se trata
de la venta de alimentos que se cultivan fuera de nuestra zona, pero no hay
límites de compra para cualquier cosa cultivada o producida en Isla Grande o la
tierra utilizada por los Intuye que cultivan alrededor de la parte continental
de la aldea .
Kowalski
miró las bolsas transportadoras en el asiento trasero.
—Incluso
con eso.
Monty
asintió con la cabeza.
—Incluso
con eso.
Habían
ido a Desembarco del Ferry para comprar panecillos en la Panadería Eamer ya que
Nadine estaba ocupada haciendo muffins y postres como su contribución a la
comida de los residentes, además de hacer pasteles, muffins y otros alimentos
para Un Pequeño Bocado para venderlos
ya que La Carne no es Verde estaba
cerrado a todos los demás para organizar
su fiesta privada. Ruthie les había pedido que comprobaran en el mercado
abierto las patatas porque la manada femenina no tenía suficiente para preparar
el puré de papas y la ensalada de patatas que Nadine quería hacer para la
cafetería.
Después
de comprar los panecillos, vagaron alrededor del mercado abierto, buscando los
otros artículos en la lista de las chicas. De alguna manera, al explicar que
estaban comprando los ingredientes necesarios para el pavo y la cena compartida
que algunos Lobos de Lakeside y los humanos estaban organizando juntos, Monty
notó que el cuarto de libra de mantequilla que había pedido se convirtió en una
libra completa que sería suficiente para la mazorca de maíz que se serviría,
una docena de huevos se convirtió en dos docenas, una libra de azúcar terminó
pesando más de una libra, y una bolsa de cinco libras de harina de un envío
fresco de la región central se añadió a sus compras cuando no estaban mirando.
Los vendedores comenzaron a mencionar sugerencias de platos que irían bien con
el pavo, incluso en un caluroso día de verano.
A
pesar de las numerosas veces que aseguraron a todos en el mercado de que el
Courtyard de Lakeside tenía árboles frutales y los Terráneos y sus inquilinos
humanos tenían un montón de fruta fresca, Kowalski terminó arrastrando una gran
canasta de fruta variada al coche.
— ¿Por
qué cree que los vendedores nos dieron tanta comida extra? —preguntó Kowalski.
—Lo
que hacemos en el Courtyard establece un precedente para Desembarco del Ferry,
así como para la interacción entre humanos y otros en las Cataratas de Talulah,
—respondió Monty—. Todos esos vendedores en el mercado eran Intuyes. Tal vez
tenían la sensación de que lo que estaban contribuyendo a esta comida haría una
diferencia para todos en el largo plazo.
—Eso
es mucha expectativa en una comida.
Monty
miró a su compañero, que estaba sentado en un coche que se calentaba
rápidamente, mirando hacia adelante. Sí, había mucha expectativa en esta
comida.
—Mi
hermano y su familia no fueron invitados, —dijo en voz baja—. Jimmy no es un
residente oficial.
—
¿Está cabreado por eso?
—Lo
está, pero mi madre y Eva fueron firmes en su decisión acerca de a quién
invitar. Mamá preparará un plato para la familia de Jimmy. — No es que él lo aprecie, Monty añadió en
silencio.
Jimmy
tuvo todo tipo de cosas a decir cuando se enteró de la comida y comprendió que
no estaba invitado. Tess y Vlad habían rechazado la invitación, diciendo que se
ocuparían de sus respectivos negocios. El Capitán Burke también había
declinado. Greg O'Sullivan lo mismo ya que estaba en camino de regreso a
Hubbney por un par de días para hablar en privado con el Gobernador Hannigan
acerca de los doctores desaparecidos. Pero Simon, Nathan y Henry estarían allí,
y, dioses, Blair también, quien había sorprendido a todos aceptando la
invitación de Eva. Poner a Jimmy, con su postura y actitud, en la misma
habitación con los cuatro era una receta segura para la matanza.
Y
poner a Jimmy en una habitación donde él tuviera tiempo de estudiar a Meg
Corbyn y darse cuenta de lo que ella era, haría daño a todos eventualmente.
Monty
bajó del coche.
—Venga.
Vamos a llevar este alimento adentro y dejar que las chicas decidan qué tiene
que ir en donde.
—Michael
está de patrulla, —dijo Kowalski—. Puesto que no estará aquí para el trabajo de
preparación, dijo que ayudaría con los platos.
— ¿Vio
ese pavo?
Kowalski
se echó a reír.
—Teniente,
la mitad de Lakeside vio ese pavo.
*****
—¿Estamos
preparando una ensalada de espinacas? —Dado que estaba en forma humana, Simon
no olfateó el colador de verduras que Meg estaba lavando y secando como lo
haría en forma de Lobo. Tomó una de las hojas y la olisqueó antes de comerla.
Luego miró a Meg—. ¿Por qué?
—Porque
eso es lo que me pidieron que hiciera, —respondió—. Cuando acabe de lavar las
espinacas, limpiaré las setas. Entonces
vas a picar.
— ¿Por
qué?
—Porque
gimoteas cuando uso un cuchillo para cortar o picar cosas.
—No lo
hago. —No se sentía tranquilo cuando Meg tenía un cuchillo por cualquier razón,
pero no gimoteaba por ello.
—Vamos
a decir que emites un sonido de preocupación, —dijo ella—. Ruth dice que hará
hervir unos huevos para agregar a la ensalada, y Merri Lee está preparando un
aliño caliente de tocino para agregar.
Si las
chicas ponían suficiente tocino y grasa en las hojas, la espinaca podía ser lo
suficientemente sabrosa como para que un Lobo comiera.
Estudió
a Meg, que parecía concentrarse terriblemente sólo para lavar algunas hojas.
— ¿Qué
pasa? ¿No quieres ir a esta cosa de la cena compartida?
—Si
quiero. Ruth, Merri y yo hemos hablado de ello, de qué puedo esperar. Están
emocionadas. Y yo también. Lo mismo Sam. — Cerró el agua y se paró con las
manos apoyadas sobre el fregadero, gotas de agua cayendo de la punta de sus
dedos.
Simon
esperó.
—Saltarín
pasa mucho tiempo conmigo y con Sam. Y él come algunas comidas con nosotros
tres cada semana.
—No
puede unirse a nosotros para esta comida, —dijo en voz baja—. Todos vamos a
estar en forma humana, y esto es diferente. Ninguno de nosotros ha compartido
comida con humanos de esta manera antes.
—Lo
sé. Pero no va a entender por qué está siendo excluido.
Parecía
triste, pero sacudió la cabeza y volvió a secar las hojas de espinaca.
Trabajaron
juntos para preparar la ensalada, diciendo poco, sin necesidad de palabras. Y
si Meg también notó el extraño silencio que pasaba por el Complejo Verde,
ninguno de ellos lo mencionó.
*****
Oso
Grr estaba sentado en una silla que había sido girada para mirar hacia la
Avenida Crowfield, lo que hizo que Monty se preguntara si el oso de peluche
había sido puesto en un aislamiento por alguna razón. Tomando la otra silla en
el porche, no se sorprendió cuando Lizzy se acercó y se apoyó en él. La abrazó
y ella le regresó el abrazo.
— ¿Oso
Grr hizo algo que yo deba saber? —Había regresado a casa para encontrar a
Lizzy, Fanny y Sarah en su porche jugando a la matatena, vigiladas por tres
Cuervos y una hembra Sanguinati que él no conocía. Bueno, la Sanguinati estaba
observando a las niñas; Los Cuervos estaban mirando el juego o esperando una
oportunidad de "pedir prestado" algunas de las bolitas brillantes.
Lizzy
sacudió la cabeza y dijo en voz baja:
—Pero
él quería que te preguntara si Frances puede venir a vivir con nosotros.
— ¿La
llamas Frances en lugar de Fanny?—Sólo su mamá llamaba a la hija de Jimmy con
su nombre propio.
—No le
gusta que le llamen con esa palabra, papá. Especialmente... —Lizzy miró a Oso
Grr como si fuera a darle valor.
Monty
sintió un escalofrío, a pesar del calor del verano.
— ¿Qué
pasa, pequeña Lizzy?
—Clarence
es malo. Él sacude su culo y la da una palmada y dice cosas como "Fanny besa fanny[1]"
y hace un sonido como de besos grandes. Cuando vivían en Toland, le dijo que le
daría un centavo si besaba a los vagos de sus amigos. Y una vez, un chico dijo
que daría a Clarence un dólar si Frances le besaba a su cosa. —Lizzy arrugó la
nariz para mostrar su opinión de hacer tal cosa—. Frances no quiere ser mala,
papá. Ella me dijo a mí y a Oso Grr que no quiere ayudar a Clarence cuando hace
cosas malas. Pero si no lo hace, él la aprieta muy fuerte hasta que llora, y
entonces el tío Jimmy la llama chillona y dice cosas malas.
Monty
se sintió enfermo, mareado, tembloroso. Clarence era un niño que podía estar
creciendo demasiado rápido y en el camino equivocado, pero todavía era un niño.
¿Estaba tratando de ser el chulo de su hermana menor? ¿Había aprendido ese
comportamiento de su padre? Jimmy, que siempre prefería usar a otra persona para
ganar dinero, ¿habría tratado de presionar a Sissy para que proporcionara
favores sexuales a sus amigos y/o a conocidos que tenían algo que él quería?
Tal
vez Jimmy lo había intentado, de la misma manera que Clarence ahora estaba
tratando de presionar a Fanny, pero no tuvo éxito. Su madre y padre habrían
sabido si algo estaba mal. Tal vez no se habían dado cuenta de cuánto daño
Jimmy estaba infligiendo con sus palabras cuando no estaban cerca para
detenerlo, pero si se hubiera hecho físico de alguna manera, no les habría
importado que él era su hijo de sangre y Sissy era su hija adoptiva. Habrían
llamado a la policía y denunciado a Jimmy. Ellos hubieran hecho lo correcto por
Sissy.
—
¿Papi?
Monty
estudió a su hija, quería preguntarle si Clarence había tratado de mostrarle...
Bueno, ella había visto las cosas de los chicos en Sam Wolfgard, pero Sam había
cambiado de Lobo a un niño desnudo después de rescatar la mayor parte de Oso
Boo, el mejor amigo de peluche de Lizzy. Y Sam había estado en una habitación
llena de adultos, muchos de los cuales no veían diferencia entre ver un pene
humano y ver a un macho levantar una pierna para regar un árbol.
—Lizzy,
¿ha intentado Clarence hacerte daño? —Su vacilación hizo que su pecho se
apretara hasta que le resultara difícil respirar.
—Un
día me llamó con nombres -uso las malas palabras- porque dije que no jugaría
con él, sólo nosotros dos, y me sentí muy triste. Pero Sarah y yo le prometimos
a Oso Grr que jugaríamos afuera solas y que iríamos a la casa de Sarah si Clarence
salía. Y prometimos incluir a Frances siempre que se le permitiera jugar con
nosotras.
—Esas
son buenas promesas. —Monty estudió al oso de peluche sentado en la otra silla.
No estaba castigado. Oso Grr estaba vigilando a un joven depredador de dos
piernas.
Los
Otros podrían no entender el daño que se podía hacer con las palabras, pero
reconocerían y responderían a cualquier amenaza física dirigida a cualquiera
que fuera considerado parte del Courtyard.
— ¿Papi?
¿Puede Frances quedarse con nosotros?
—Es
complicado, Lizzy, —dijo. Para los humanos de todos modos—. Pero Fan... Frances
puede jugar aquí contigo todo lo que quiera. Y hablaré con la señora Eva sobre
dejarla jugar en la casa de los Denby también.
—Pero
no a Clarence. —No es una pregunta. Sonaba más como una súplica.
—No,
Clarence no. —Él la dejó en el suelo—. ¿Pueden tú y Oso Grr quedarse aquí un
poco? ¿Por aquí en el porche? —Le pediría a Kowalski que vigilara las cosas
durante unos minutos.
—
¿Solos? —Ella lo miró con esos grandes ojos marrones—. ¿No podría la señorita
Leetha quedarse con nosotros?
—
¿Letha? ¿Quién es ése? —Tenía una sensación que ya conocía la respuesta.
—Vivía
en Toland. Ahora vive arriba.
Monty
estudió a Lizzy como si nunca la hubiera visto antes. Unos meses atrás, había
vivido en un edificio de apartamentos donde los adultos habrían sentido pánico
al ver a una de las Terráneas. Ahora, tener a una Sanguinati para los vecinos
de arriba no valía la pena pensarlo dos veces... era, de hecho, un extraño tipo
de consuelo.
—Preguntare.
No tardaré mucho y cerraré la puerta. No contestaste ni tú ni Oso Grr ¿Lo
prometen?
—Nosotros
prometemos.
Entró
y llamó a Pete Denby.
—
¿Pete? Soy Monty. Necesito hablar unos minutos.
—Por
supuesto. ¿Quieres dar una vuelta?
—No. Me
gustaría reunirme en tu oficina. Esta charla es más... oficial.
Silencio.
Entonces,
—Te
veré allí en unos minutos.
—Alguien
viene a ver a Lizzy. —Lo que significaba que, Robert y Sarah eran bienvenidos a
venir si Pete necesitaba a alguien que los cuidara.
—Eso
está cubierto.
Preguntándose
cuál de los Otros estaba en donde los Denby, Monty colgó, salió de su
apartamento y cerró la puerta con llave. Subió las escaleras en silencio, sin
querer ver a Jimmy en este momento. Llamó a la puerta del piso de arriba muy
silenciosamente.
La
mujer que abrió la puerta era la misma Sanguinati que había estado en su porche
hace un rato. Si hubiera sido humana, le habría dado unos cuarenta y poco. No
tenía ni idea de su edad, pero algo en la mirada de aquellos oscuros ojos le
decía que había visto y hecho mucho en su vida.
A
diferencia de Nyx Sanguinati, esta vampira no usaba ropa pasada de moda ni se
movía como una mezcla de humo y forma humana, haciendo que fuera obvio lo que
era. De hecho, esta hembra sería notada por su belleza madura y su gracia, y
ningún hombre que la admirara mientras pasaba, vería a un depredador vestido
con pantalones negros y una camiseta, ambos hechos con un material sedoso y de
aspecto rico.
—
¿Señorita Leetha? —Era difícil no añadir una L al final de su nombre.
—
¿Teniente?
— ¿Le
importaría quedarse con Lizzy por unos minutos? Necesito ocuparme de algunos
asuntos.
—Puedo
vigilar.
—Gracias,
—se giró para marcharse.
—
¿Teniente? Si su negocio se vuelve demasiado complicado, podemos simplificarlo
para usted.
No
miró hacia atrás, ni siquiera se atrevió a hacer un sonido evasivo que ella
pudiera interpretar como un permiso tácito para matar a su hermano.
Llegó
a la Oficina del Enlace justo cuando Pete llegaba al piso de arriba y tenía la llave
en la puerta exterior.
—
¿Cómo de oficial va a ser? —preguntó Pete cuando estaban dentro de su oficina.
Abrió la pequeña nevera y levantó dos botellas de cerveza.
—No lo
suficientemente oficial como para negarme a una de esas, —respondió Monty.
Pete
abrió las botellas, entregó una a Monty, y luego se sentó en una de las sillas
de su área de espera.
Monty
se sentó en la otra silla, tomó un largo tirón de su cerveza, y luego le contó
a Pete todo lo que Lizzy le había dicho.
—Hasta
ahora es sólo abuso verbal, —comenzó Monty, luego recordó el pellizco. Difícil
decir dónde caería en una escala entre las disputas de hermanos y el abuso—.
Principalmente.
—
¿Sólo abuso verbal? —preguntó Pete mientras hacía comillas al repetir las
palabras—. Venga ya.
Se
frotó la frente con la fría botella.
—Sí,
ya sé. Las palabras pueden hacer tanto daño como los puños. —Bebió más de la
cerveza—. El lema en la casa de mis padres era "sin palabras
desagradables, sin acciones desagradables". Y si éramos crueles, incluso
sin intención, se esperaba que al menos tratáramos de arreglar las cosas.
—Tu
hermano no parece haber abrazado el lema familiar.
—No.
Pero él aprendió a evitar ser atrapado con demasiada frecuencia por mala
conducta, y cuando era atrapado, siempre trató de transferir la culpa a otra
persona, o persuadir a la otra persona a negar que hubiera algún mal. —Monty
puso la botella en un posavasos que Pete le dio—. Ciertamente, entrenó a Sissy
para que fuera complaciente en lo que él tomaba de ella cuando éramos niños, y
nada de lo que les decía a ninguno de ellos parecía hacer la diferencia.
Monty
vaciló, luego se preguntó por qué, ya que él había pedido esta reunión. Pete ya
tenía formada una opinión sobre los miembros de su familia. Dudaba que
cualquier cosa que dijera ahora alterara esas opiniones, o sorprendiera a un
abogado.
—El
hombre con el que Sissy estaba involucrada, el padre de las niñas. Era un tipo
agradable, firme. Y él realmente la amaba. Sólo lo vi un par de veces, pero me
gustaba. Estaba feliz cuando quedó embarazada de Carrie, y él y Sissy hablaron
de casarse. Entonces sucedió algo, y ya no hablaban de matrimonio. Pero
permanecieron juntos, y a pesar de que se alejó un poco, las cosas parecieron
tranquilizarse.
—No te
casaste con la madre de Lizzy, —dijo Pete con ligereza.
—Yo
quería casarme. Elayne no. O, más concretamente, su madre no quería que se
casara con un ser inferior social y financieramente.
— ¿Qué
pasó con Sierra?
—Nunca
lo supimos. Se fue dejándola con las chicas un año después de que Bonnie
naciera. La única vez que lo confronté después de que él se fuera, dijo que no
le importaba trabajar largas horas para mantener a sus propias hijas, pero él
estaría condenado si se rompiera la espalda por un parásito. No lo entendí en
ese momento. Ahora, después de haber visto a Jimmy y Sissy aquí juntos, pienso
en cómo su pareja pagaba algunas de las facturas directamente, o compraba ropa
y juguetes para las niñas, o traía una bolsa de comestibles cuando iba a
visitar a sus hijas. Pero no le daba dinero a Sissy.
—Jimmy
estaba sacando una parte del dinero de la casa, y la pareja de Sierra descubrió
por qué tenían problemas para pagar cuentas. —Pete suspiró—. Ella probablemente
prometió dejar de dar dinero a su hermano, y las cosas se calmaron por un
tiempo.
Monty
asintió con la cabeza.
—Entonces
Jimmy volvió a aparecer y la desangró. Y cuando ella rompió la promesa
demasiadas veces, su pareja se fue.
— ¿Sabes
dónde encontrarlo?
Sacudió
la cabeza.
—Mamá
podría saberlo. No importa ahora. Sissy está fuera del alcance de Jimmy. Pero
Frances...
—No
puedes sacar a un niño de sus padres porque te dijeron algo que pasó en otra
ciudad, —dijo Pete—. No hay pruebas de que Clarence haya obligado a Frances a
hacer nada, y sería su palabra contra la suya.
—Los
tribunales humanos no podrían, y no querrían, sacar a Frances de sus padres por
dichos, pero la ley humana no se aplica en el Courtyard, —dijo Monty—. No
necesitaría convencer a un juez de que Frances está en peligro.
Pete
se inclinó hacia delante.
—Hay
suficiente diferencia de edad entre tú y Sierra para proporcionar cierta
distancia, pero hermanos y hermanas cercanos a la misma edad no siempre se
llevan bien. Si tienes alguna duda al respecto, te dejaré pasar una tarde con
Sarah y Robert cuando están por la labor de ser la cruz de la vida del otro.
Monty, si esto es una tempestad en una tetera, si Frances ha exagerado una
pelea de hermanos y añadió un dramático florecimiento de simpatía, y convences
a Simon Wolfgard para actuar, no hay vuelta atrás. Tú tienes más experiencia
con los Otros que yo, pero habiendo observado cómo los adultos dejan que los
chicos peleen para arreglar las cosas entre ellos y sólo intervienen cuando
parece que uno de ellos se lastimará, tomarán tu palabra de que la amenaza es
lo suficientemente grave como para quitarle a la niña. Pero, ¿qué sucede si
Simon o Vlad o Henry deciden que Frances debería ser reubicada? No podrás
retirar tu petición, no serás capaz de suavizar lo que les hubieras dicho a fin
de mantenerla en Lakeside.
—Lo
sé. —Podía ser nada más que Frances siendo infeliz y solitaria. Había sido
arrancada de su casa en Toland y se le había limitado el contacto aquí con los
niños con los que podía jugar. Incluso ahora, el apartamento era un hogar
temporal, uno que su familia podría perder en cualquier momento. Esto podría
ser nada más que una niña algo introvertido que quiera sentirse estable. O
podría estar en peligro real de tener de proxeneta a su propio hermano.
Monty
cogió la cerveza y vació la botella.
— ¿Qué
vas a hacer? —preguntó Pete—. ¿Qué harías si habláramos de Lizzy?
—Hablar
con Eva y Ruth para que estén conscientes de un peligro potencial. Hablar con
Karl y Michael para una tarea no oficial. —Monty soltó su aliento lentamente—.
Y hablar con Simon y Vlad sobre cuándo el comportamiento humano requiere
intervención independientemente de la edad de los humanos.
—
¿Antes o después de la cena compartida?
—Después.
No hay por qué enardecer a todo el mundo antes de que nos sentemos juntos para
lo que supone una cena compartida. —Pero le pediría a Leetha Sanguinati que le
informara si Jimmy, o Clarence, tenían algún visitante.
*****
[1] Fanny: Es un juego de palabras, ya que además de nombre propio también
es una forma de coloquial de decir "coño". Tiene que ver con la forma
en cómo entienden los apodos tanto Cyrus como su hijo Clarence, mientras todos
los demás le dan una connotación cariñosa ellos le dan una connotación de burla
y agravio, Cyrus con su hermana usando el apodo de Sissy -que es una forma de
decir coloquialmente cobarde- y Clarence con su hermana Fanny, diciéndole
"Coño. (N.de T.)
Ay, ay, espero que salven a la niña y que los antiguos ya dejen que maten a Jimmy, que emocionante se quedó, gracias chicas por su trabajo me muero de ansiedad de esperar, jajaja
ResponderEliminarNo se ustedes pero varias cosas me generaron diversas emociones de este capítulo...
ResponderEliminarEl tema de Clarence con su hermana... por dios ese chico es igual que el padre... sin palabras
La escena de Oso Grr actuando como un guardián... me emocionó, porque de alguna manera Lizzy, la un libro atrás era demasiado caprichosa, ahora ha empatizado con los Otros y es como si su Oso -regalo de Henry- fuera un Terráneo guardián.
Y por supuesto me encantó la escena tan domestica de Simon cocinando con Meg... aunque sea bajo protesta...
Cuando acabe de lavar las espinacas, limpiaré las setas. Entonces vas a picar.
— ¿Por qué?
—Porque gimoteas cuando uso un cuchillo para cortar o picar cosas.
—No lo hago. —No se sentía tranquilo cuando Meg tenía un cuchillo por cualquier razón, pero no gimoteaba por ello.
—Vamos a decir que emites un sonido de preocupación, —dijo ella
Si, esa parte de clarence abusando de su hermana es fuerte porque son niños, y consecuencia de los ejemplos en la familia, pero se suaviza con la parte de Meg y Simon interactuando en la cocina abrazos chicas gracias por la traducción.
EliminarGracias por esto, aunque lleve varios capítulos con ganas de partirle el Cuello a jimmy con mis propias manos
ResponderEliminarJaja me encanto la escena tan hogareña de Simón y Meg. Pero también me hizo pensar en lo que la autora intenta transmitir y hacer conciencia de que las malas conductas y acciones buenas o malas tienen como reflejo de la educación y acciones que reciben en casa así como los diferentes tipos de violencia que no sólo se enfoca a la física sino a tras que son más difícil de descubrir y superar 😥😥
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