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martes, 3 de abril de 2018

Adelanto: Capítulo 22 - Lake Silence - Anne Bishop




CAPÍTULO 22



Vicki


Thaisday, 15 de Juin

Sentada en la biblioteca de El Jumble con Ilya Sanguinati y el oficial Grimshaw, miré los libros que había archivado ayer y tuve una epifanía. Aunque disfrutaba leyendo novelas de suspenso, no quería ser la chica enredada en la trama de uno por ser la mejor amiga de la heroína o la chica que se enamora del héroe, esa chica por la que siente cierto afecto porque le da sexo mientras supera la pérdida de su único y verdadero amor. Esas eran las chicas que terminaban siendo arrojadas a la trituradora de madera o se quedaban en el fondo de un pozo profundo y seco lleno de arañas y milpiés; llenándose de repente de forma bastante inconvenientemente para que la chica fuera encontrada pero no a tiempo. Especialmente si ella era el interés amoroso pasajero del héroe de la historia. Esas también eran las chicas que estarían atadas en una cueva y se convertirían en el marco para una escultura de guano de murciélago.

Pero incluso a pesar de la epifanía no pude evitar soltar una carcajada cuando el oficial Grimshaw expresó su teoría sobre los clips de corbata.

—¿Crees que Yorick pertenece a una sociedad secreta? ¿Una organización con apretones de manos secretos y palabras codificadas? ¿Una sociedad que, queriendo permanecer en secreto, identifica a sus miembros con un clip de corbata? ¿En serio?

Aparentemente así era. Miré a Ilya Sanguinati para ver qué pensaba sobre la teoría de Grimshaw. No sé si era porque es un vampiro o por ser abogado, pero él dominaba la cara del póker.

—Crees que es posible, —le dije a Ilya.

—Debería ser considerado, —respondió—. Indica una conexión entre el detective Swinn y tu ex marido.

Grimshaw se inclinó hacia mí, sus antebrazos descansando sobre sus muslos, su cara llena de sincera preocupación.
—Piénsalo. Estuviste casada con el hombre ¿por cuantos años? ¿Pertenecía a algún club, salía a reuniones mensuales donde sólo había miembros? —Cogió una bolsa de pruebas que contenía el clip de corbata y la sostuvo en alto—. Tu ex marido y al menos uno de los detectives en un equipo de la UIC tenían este mismo clip de corbata. Un equipo de la UIC de Bristol debería haber aceptado la asignación cuando informé de la muerte sospechosa de Franklin Cartwright en tu propiedad. Pero un equipo de Putney, liderado por Marmaduke Swinn, apareció en su lugar.

—La policía en Putney no se ha preocupado por los ciudadanos de Sproing hasta ahora, —dijo Ilya Sanguinati.

—Bristol tiene dos equipos de UIC que se supone deben manejar cualquier muerte sospechosa u otros incidentes en Bristol y el área dentro de la jurisdicción de Bristol, que incluye al Lago Silence. Se supone que la patrulla de autopistas de Bristol debe manejar cualquier cosa en las carreteras entre el Lago Crystal y el Lago Silence, y eso incluye responder llamadas de Sproing. —La expresión de Grimshaw se endureció—. Era posible que ambos equipos de Bristol ya tuvieran casos y no pudieran enviar a nadie ese día, pero lo verifiqué con el capitán Hargreaves y él me dijo que había un equipo disponible. De alguna manera Swinn escuchó sobre Cartwright y reclamó jurisdicción, diciendo que estaba relacionado con un crimen que ya estaba investigando. Como nadie en Bristol quería pelear con Swinn por ir a Sproing, le dejaron tener el caso.

—Dioses, —dije—, ¿qué hacen ustedes? ¿Jugar piedra, papel o tijeras para decidir quién tiene que venir aquí? —Sabía que a la policía no le gustaba acudir a Sproing, y para ser justos, tenían buenas razones para sentirse así, pero saber que a veces venía protección de alguien como Swinn porque nadie más quería venir, no me hacía sentir ni feliz ni contenta, ni a salvo.

No creo tener una buena cara de póquer, porque Grimshaw parecía incómodo. La cara de póquer de Ilya Sanguinati no cambió, pero tuve la sensación de que podría tener algunas cosas que decirle a alguien sobre cómo los humanos protegían a otros humanos.

—En este momento, no importa cómo consiguió Swinn el caso, —dijo Grimshaw—. Lo que importa es por qué lo quería.

—Ese hombre, Franklin Cartwright, —dijo Ilya—. ¿Tenía uno de esos clips de corbata?

—No lo sé, —respondió Grimshaw—. Estaba vestido casualmente cuando lo encontraron. El equipo de Swinn recogió sus cosas de la pensión.

Entonces, ¿ahora tenemos una conspiración? Esto estaba cada vez mejor. O peor y peor

Pasé mis dedos por mi cabello, desalojando algunos de las horquillas que lo mantenían bajo control. Ilya Sanguinati miró mi pelo salvaje. Su cara de póquer se rompió. Sus labios se crisparon. Me prometí que cubriría todos los espejos hasta que pasara un cepillo por mi pelo para no asustarme.

Ni que hablar de ese momento en que me hice un brushing en mi muy enmarañado cabello. Tuve que hacer una cita de emergencia con mi estilista y hacerme una brushectomía para evitar tener el cepillo por el resto de mi vida.

—¿Cuántas sociedades secretas puede haber? — Solté la pregunta, sin esperar una respuesta.

—Ya que son secretas, es una incógnita, —respondió Grimshaw.

Sus ojos se quedaron en blanco. Lo vi tragar. Nos habíamos olvidado momentáneamente de que uno de nosotros no era como los demás.

Ahora ninguno de nosotros miró al vampiro en la habitación. El movimiento Humanos Primeros y Últimos no fue un secreto. Fue un grupo político pro-humano, anti-Otros que comenzó con discursos y terminó con los actos de violencia que iniciaron la guerra que mató a mucha gente en Thaisia ​​y destruyó la Alianza de Naciones del Bloque Romano en el otro lado del Océano Atlántik. ¿Pero sociedades secretas con agendas secretas que podrían representar una amenaza para los Terráneos?

Tuve un mal presentimiento. Grimshaw y yo acabábamos de pintar dianas en las espaldas de varias personas, incluido mi ex marido. Yorick solía decir que un hombre de negocios exitoso tenía que crear algunos enemigos. No creo que hubiera considerado que los Sanguinati podrían ser algunos de ellos cuando dijo eso.

—Puede que no sea una sociedad secreta, —dije—. Podría ser un grupo privado o exclusivo que no quiere que su nombre salpique en los periódicos por hacer obras de caridad. O podría ser un club. Yorick era miembro de un par de clubes donde se codeaba con personas que tenían dinero o influencia social. Esos clubes eran exclusivos pero no secretos.

Grimshaw asintió.
—Eso tendría más sentido, aunque dudo que Marmaduke Swinn o Franklin Cartwright tuvieran dinero o la influencia social para pertenecer a dicho club.

—No importa si el detective Swinn y Franklin Cartwright son parte de ese grupo, —dijo Ilya—. No cambia el hecho de que los humanos con una agenda están causando problemas en El Jumble. Hasta que sepamos quién pertenece a este club de clip de corbata, no podemos determinar si son meramente una molestia o una amenaza real.

Tuve la sensación de que todos los que estaban incluidos en el "sepamos" al que Ilya Sanguinati se refirió tenían colmillos por lo menos. Lo que significaba que no incluía ni a Grimshaw ni a mí.

—Es una investigación humana, —dijo Grimshaw, girándose en su asiento para mirar directamente a Ilya.

—Es una investigación humana porque Victoria llamó a la policía en lugar de llamarnos, —respondió Ilya.

Oh, Dios mío. ¿Había pisado algunos dedos Terráneos informando el cuerpo a los humanos en lugar de llamar a Albergue Silence? Por supuesto, no sabía que El Jumble fuera un asentamiento Terráneo o incluso la especie de mis vecinos al otro lado del lago, así que esperaba que los Sanguinati tomaran eso en cuenta.

—Franklin Cartwright se alojaba en la pensión, e hipotéticamente trabajaba para Yorick, —le dije, tratando de suavizar cualquier agite de plumas o colmillos—. Incluso si no hubiera llamado a la policía cuando Aggie trató de calentar el globo ocular en el microondas, alguien se habría dado cuenta de su desaparición. —Me gustaba decir hipotéticamente. Era una palabra tan de policías y criminales.

—Los humanos desaparecen en el país salvaje todo el tiempo.

Grimshaw parecía sombrío. No lo culpé. Nos recordaba que la supervivencia no solo dependía de que los humanos jugaran bien y compartieran la caja de arena, sino que también dependía de no llamar la atención de todos los depredadores grandes e inteligentes que merodeaban más allá del límite del cajón de arena, y algunas veces cazaban dentro la caja de arena cuando tenían una razón para enfocarse en una presa en particular.

—Deberías preguntarle a las Xavier, —dije, rompiendo el tenso silencio que siguió a las palabras de Ilya—. El detective Swinn, su equipo y el hombre muerto se quedaron en la pensión. Si alguno de ellos tuviera uno de esos clips, Ineke podría haberlo visto. —Señalé el broche de corbata de la bolsa de pruebas—. Podrías mostrarle esa o incluso sacarle una foto para mostrar.

Fue la forma en que Grimshaw no me miró lo que me dijo que alguien, o varios, ya le habían preguntado a Ineke sobre el broche de corbata.

—Las Xavier no son las únicas que podrían ayudar a descubrir quién usa ese símbolo, —dijo Ilya, enfocando una mirada de depredador en Grimshaw—. Podemos ayudar a localizar a otros humanos que pertenezcan a este grupo. Puede suministrarnos una foto.

Vampiro y policía fijaron sus miradas.

—Pertenecer a una organización no es prueba de culpa o complot, —dijo Grimshaw.

—Pero obtener una muestra de quién podría pertenecer a un grupo en particular puede ayudar a determinar la agenda del grupo, —respondió Ilya. Luego de un profundo silencio, agregó—: Nuestro interés es comprender por qué Franklin Cartwright llegó a El Jumble y qué se suponía que debía lograr. Victoria es la propietaria de los edificios y la custodia de la tierra que conforma El Jumble. Alguien piensa lo contrario y está causando problemas. Continuaremos con esto hasta que sepamos por qué. Estamos dispuestos a trabajar con la policía en este asunto, o trabajaremos por nuestra cuenta.

En otras palabras, alguien puede ir a la cárcel si ha sido malo o esa persona puede ser comida. Dadas esas elecciones, estoy bastante segura de que elegiría la cárcel. Por otra parte, Ilya Sanguinati se veía delicioso, y morir de orgasmos y pérdida de sangre podría no ser un mal camino.

—La cooperación siempre es apreciada. —Grimshaw no sonó como si apreciara haber sido arrinconado, pero dijo las palabras que al menos deberían retrasar la muerte de más personas.

Pero iba a prestar mucha atención a los estantes en la tienda general en caso de que hubiera una falta repentina en el ketchup y la salsa picante.

2 comentarios:

  1. Todavía no me hago idea de la personalidad de Vcki a veces parece ingenua pero comentarios como "Por otra parte, Ilya Sanguinati se veía delicioso, y morir de orgasmos y pérdida de sangre podría no ser un mal camino" te hace acalorar y pensar que esta mujer tiene doble personalidad Graciasssss por compartir su trabajo

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  2. Puess... si te lo plantean asi, yo me anoto con una muerte prematura... jaja

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